Esta proteína ayuda a fortalecer y proteger huesos, ligamentos, tendones y articulaciones. Así, es clave para deportistas como los runners.
¿Has escuchado hablar del colágeno y sabes qué funciones cumple en nuestro cuerpo? Si no es así, te contamos que básicamente es una proteína compuesta de aminoácidos, que a su vez son sustancias formadas por carbono, oxígeno, hidrógeno y nitrógeno. La nutricionista deportiva Isidora Selman aporta más detalles: “El colágeno contiene aminoácidos específicos -glicina, prolin, hidroxiprolina y arginina- y constituye aproximadamente el 30% de las proteínas en el cuerpo. Se trata de estructuras resistentes y fuertes que se encuentran en todo el cuerpo: en los huesos, tendones y ligamentos”.
La especialista agrega que es el principal constituyente de la piel y puede ayudar a construir la resistencia mecánica de este órgano y también a protegerla al prevenir la absorción y difusión de sustancias patógenas, toxinas ambientales, microorganismos y células cancerosas. El colágeno además está presente en todos los tejidos del músculo liso, los vasos sanguíneos del tracto digestivo, el corazón, la vesícula biliar, los riñones y la vejiga que sostienen las células y tejidos juntos; e incluso es el componente principal del pelo y las uñas.
En ese contexto, esta proteína tiene una importancia particular para las articulaciones, toda vez que es parte mayoritaria de los cartílagos que las protegen. Isidora explica: “Las articulaciones son zonas de contacto que permiten el movimiento. Toda la zona de los huesos está protegida por un cartílago articular y forma parte de la articulación evitando el degaste por roce. El cartílago está compuesto en un 60% por fibras de colágeno. Este cartílago se regenera y destruye constantemente; con el paso de los años o por sobrepresión o traumatismo este equilibrio se rompe y la destrucción gana a la reconstrucción y de aquí nace la importancia del colágeno para nuestro organismo”.
Fuentes y Consumo
De acuerdo a lo expuesto, el colágeno juega un rol clave en el bienestar de nuestro organismo, especialmente para quienes desarrollan actividades físicas que exigen más a tendones, ligamentos y articulaciones, como ocurre con el running.
Con la edad, la producción de esta proteína disminuye y las estructuras de las células se debilitan, los tendones y los ligamentos se vuelven menos elásticos, las articulaciones se endurecen, etc.
Así, es conveniente consumir alimentos y suplementos que contengan colágeno o ayuden a su absorción. Al respecto, Isidora Selman señala: “Con la incorporación de determinados alimentos en la dieta se puede aumentar la producción de colágeno. En la naturaleza, el colágeno se encuentra exclusivamente en los animales, especialmente en la carne y en los tejidos conectivos de los mamíferos”.
También existen suplementos que contienen colágeno. En relación a ello, la nutricionista comenta: “La suplementación diaria de colágeno puede mejorar la piel, la hidratación y la elasticidad. Sin embargo, una pastilla no necesariamente va a ser absorbida en su 100%, y menos aún llegar al tejido conectivo para lograr un efecto 100% eficaz. Es por esto que debemos preocuparnos de mantener una buena alimentación, rica en vitamina C la cual es necesaria para la correcta síntesis de colágeno”.
Hay suplementos donde el colágeno viene hidrolizado. “Esto ayudará a que su disponibilidad sea mejor, pero no significa que sea 100% efectivo”, sostiene la especialista. Y agrega que en caso de consumirlos “es recomendable utilizar dosis de 10 gramos por día y siempre en la noche después de cenar. Por ser una proteína necesitamos de un pH ácido para su mejor absorción, pero esto va a depender exclusivamente de las necesidades nutricionales de cada individuo”.
Advierte, además, que no es conveniente consumir en caso de embarazo o lactancia, como tampoco en personas con hipersensibilidad a estos compuestos, o que padezcan fenilcetonuria o requieran de una dieta baja en proteínas.