Los cereales aportan carbohidratos, fibra y micronutrientes importantes para la dieta. Aquí detallamos algunas recomendaciones para su consumo en corredores.

Un alimento sano y nutritivo, especialmente recomendado para el desayuno. Ese es el concepto común que tenemos de los cereales que habitualmente encontramos en tiendas y supermercados. Y lo cierto es que esa idea no está para nada errada.
Así lo corrobora Jéssica Liberona, nutricionista del Programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes, quien señala: “Los cereales de desayuno son una buena fuente de carbohidratos y, dependiendo del tipo de cereal, pueden aportar fibra dietaria. Además, entregan micronutrientes, entre ellos los de mayor relevancia son las proteínas del complejo B, hierro y zinc”.
Ahora bien, en el mercado existe una amplia variedad de estos productos, por lo que cabe preguntarse cuáles son los más recomendables para los corredores y de qué manera conviene incorporarlos a nuestra dieta.
A continuación se entregan algunas orientaciones al respecto.

Cuáles y Cuánto

Si vas a practicar running, ¿qué tipo de cereales conviene comer? Jéssica responde: “Dependiendo del momento, se pueden seleccionar según el aporte de azúcares y fibra. Si se está planificando un entrenamiento o una competencia a primera hora de la mañana, lo ideal es consumir un cereal que aporte un mayor porcentaje de azúcares y con menor concentración de fibra, ya que ésta puede estimular el tracto gastrointestinal y generar molestias al momento de correr”.
Agrega que una buena carga de carbohidratos (azúcares) de rápida biodisponibilidad, permitirá contar con la energía suficiente para desempeñar la actividad de manera adecuada.
¿Cuánto y cómo consumirlos? “La porción recomendada varía de persona a persona, ya que dependerá de los requerimientos energéticos individuales determinados por las horas de entrenamiento y/o competencias, además de la actividad laboral o académica que tenga el deportista”, indica la profesional de la Clínica Universidad Los Andes.
La especialista añade que lo ideal es acompañarlos “con lácteos descremados o semidescremados que aportarán proteínas, frutas frescas con un buen aporte de antioxidante como los berries y frutos secos naturales, que aportarán energía y grasas ‘saludables’”.
En relación a cuándo comerlos, Jéssica Liberona destaca que el consumo de cereales será útil tanto antes como después de entrenar y/o competir, ya que al hacerlo previamente permitirán disponer de energía de manera rápida, mientras que en el post ejercicio ayudarán a recuperar los depósitos de glucógeno que se pueden haberse vaciado en nuestro cuerpo a raíz de la actividad realizada.